PRINCIPIOS NO NEGOCIABLES

"Este Esdras subió de Babilonia. Era escriba diligente en la ley de Moisés, que Jehová Dios de Israel había dado; y le concedió el rey todo lo que pidió, porque la mano de Jehová su Dios estaba sobre Esdras". Esdras 7:6

En el día a día nos enfrentaremos con situaciones que pondrán a prueba nuestro carácter, nuestro estilo de hacer las cosas y la forma de decidir sobre ellas.

Si tu anhelo es ser una persona de negocios, profesional, que influye sobre un entorno al prestar servicios, crear trabajo, orientar profesionalmente a otros, etc.; estas en la mira de Dios. Le interesa contar contigo y disponer de todos tus talentos y habilidades para un propósito divino.

¿Cómo sucederá esto? Cuando tus pautas internas o “principios” se cumplen diligentemente.

Esdras era un profesional de las letras, sabio y erudito, tenía un gran prestigio por su oficio; no obstante, lo que destaca la Biblia de él es su valor al ser diligente en el cumplimiento de los principios de la palabra. Se dice fácil, pero a medida que creces se hacen más complejas las decisiones a tomar para que tus negocios estén bien conducidos.

Fíjate el reto tan grande en el que entro Esdras (Esdras 10:10-12), confrontó a todo un pueblo ante la falta de principios, “apago la música”, hizo cumplir la palabra a pesar de la dura decisión y del sufrimiento que causaría el despegarse de los seres que amas y más quieres. ¿Podríamos llegar al extremo de sacrificar “jugosas cuantías y beneficios” a cambio del cumplimiento de valores personales? Podríamos. En Esdras tenemos un ejemplo, no habrá sido fácil. Sin embargo, sabemos que Esdras conmovió el corazón de Dios, puso su mano sobre él y avanzó en todo lo que se propuso. Estos son los negocios que nos interesan, aquellos que nos engrandecen sólo por el favor de Dios y a los que llegamos tras pasar pruebas arduas.

Te animo a soñar con grandes propósitos, beneficiar y ayudar a muchos, y que en el camino de tus valores, Dios te encuentre y use tus principios para grandes alcances.